miércoles, 8 de abril de 2009

Borges y los orangutanes eternos, de LF Verissimo y El asombroso viaje de Pomponio Flato, de E Mendoza

Estos dos libros son parodias del policial, y de los dos se puede decir, más o menos, lo mismo: que los dos son muy divertidos, que son irreverentes y que están llenos de ese tipo de referencias que alimentan el propio orgullo nerd.

Borges y los orangutanes eternos narra la historia de un traductor de una revista brasilera sobre Poe, al cual le llega un texto de Borges para traducir, cuyo final considera aburrido y cambia a su gusto. Borges le envía una carta con su clásico tonito irónico para quejarse del asunto y el protagonista de nuestra historia pasa varios años acechando la casa de Borges en Argentina para intentar pedirle perdón, pero no lo consigue. Muchos años después, se encuentran en un congreso sobre Poe, en Buenos Aires. Borges jamás reconoce a su apócrifo, hasta que el asesinato de uno de los congresistas los pone como pareja de detectives.

Pomponio, el protagonista de El asombroso viaje de Pomponio Flato, es un romano advenedizo que viaja por todo el imperio romano en busca de una fuente milagrosa para curar el mal que lo aqueja: una fuerte diarrea. Unos árabes lo llevan hasta Nazaret, donde se supone que hay una fuente milagrosa. Allí lo contacta un niño, Jesús, que ha escuchado sobre la llegada de este romano flatulento y le pide que lo ayude a demostrar la inocencia de su padre José, un carpintero a quien se lo acusa de haber cometido un asesinato. Aquí la pareja de detectives está compuesta por Pomponio Flato y, nada menos, Jesús.

De los dos libros puede decirse, también, que no son gran cosa en materia literaria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
◄Design by Pocket, BlogBulk Blogger Templates. Blog Templates created by Web Hosting